Nueva app te ayuda a detectar microplásticos en tus bebidas diarias

Una nueva aplicación desarrollada por científicos de la Universidad de Columbia Británica promete revolucionar la forma en que detectamos microplásticos en nuestras bebidas diarias. Estos contaminantes, invisibles a simple vista y de tamaño inferior a cinco milímetros, han infiltrado el aire, el agua y los alimentos, y representan un peligro potencial para la salud humana. Aunque los efectos de los microplásticos en nuestro organismo aún se están investigando, su capacidad para absorber toxinas y penetrar barreras biológicas los convierte en una preocupación creciente.

Los métodos actuales para medir la presencia de microplásticos son complejos y costosos. Sin embargo, esta innovadora app simplifica y abarata el proceso, permitiendo a cualquier persona analizar muestras de agua en cuestión de minutos. El dispositivo portátil, creado a partir de una caja biodegradable impresa en 3D, utiliza un microscopio digital inalámbrico, una luz LED verde y un filtro de excitación para detectar las diminutas partículas. Con una sola gota de agua y un etiquetado fluorescente, el dispositivo puede identificar y medir los microplásticos presentes, mostrando los resultados de manera clara y accesible en tu smartphone.

Tianxi Yang, uno de los desarrolladores de la herramienta, señaló que "la descomposición de plásticos mayores en microplásticos representa una amenaza significativa para la salud humana y los ecosistemas. Esta nueva técnica de detección rápida y económica podría ser clave para proteger nuestra salud".

Actualmente, el dispositivo está configurado para detectar plásticos de poliestireno, pero puede ser adaptado para identificar otros tipos como polipropileno y polietileno con ajustes en el algoritmo. Además de su potencial uso doméstico, los científicos esperan que esta tecnología ayude a reducir la dependencia de plásticos de un solo uso, impulsando la adopción de alternativas más sostenibles como el vidrio o el acero inoxidable.

Este avance subraya la necesidad urgente de concienciar sobre la omnipresencia de los microplásticos y de desarrollar políticas y tecnologías que mitiguen su impacto en nuestro planeta y en nuestra salud.