Estudio revela cómo el consumo frecuente de cannabis afecta la memoria
Investigadores advierten que el uso frecuente de cannabis podría dificultar la toma de decisiones y la comunicación
El consumo regular de cannabis puede perjudicar la memoria de trabajo, una función esencial del cerebro que permite retener y utilizar información a corto plazo. Un reciente estudio publicado en la revista JAMA Network Open sugiere que esta alteración podría impactar negativamente en la seguridad, la comunicación y el desempeño laboral de los consumidores habituales.
Joshua Gowin, autor principal del estudio y profesor asistente de radiología en la Facultad de Medicina Anschutz de la Universidad de Colorado, explicó que la memoria de trabajo es crucial para tareas cotidianas como conducir o interactuar en una conversación. "Cuando miras el punto ciego al manejar, debes recordar lo que viste para tomar una decisión segura. De manera similar, en una conversación laboral, es necesario retener la información para responder adecuadamente", detalló el investigador.
El estudio analizó a más de 1,000 consumidores actuales o previos de cannabis, quienes se sometieron a pruebas cognitivas y escáneres cerebrales. Los resultados mostraron una disminución en la actividad de áreas cerebrales responsables de la toma de decisiones, la memoria y la atención. Se encontró que el 63% de los consumidores frecuentes presentaban una activación reducida en tareas relacionadas con la memoria de trabajo, mientras que el 68% de quienes dieron positivo en pruebas recientes de consumo mostraron efectos similares.
Sin embargo, el estudio no pudo establecer una relación de causa y efecto entre el consumo de cannabis y el deterioro cognitivo. Carol Boyd, profesora emérita de la Universidad de Michigan y experta en adicciones, señaló que si bien estos hallazgos respaldan la percepción social sobre los efectos del cannabis en la memoria, no se sabe con certeza si la función cognitiva se recupera tras un período de abstinencia prolongado.
Otro aspecto relevante del estudio es que los consumidores frecuentes solían tener un nivel socioeconómico y educativo más bajo, además de mayor propensión al consumo de alcohol y tabaco. A pesar de ello, los investigadores concluyeron que el uso de alcohol no explicaba los efectos observados en la memoria de trabajo, mientras que el consumo crónico de cannabis sí mostraba una correlación más significativa.
Estos resultados sugieren que el consumo prolongado de marihuana puede estar asociado a déficits en la memoria de trabajo, lo que podría tener implicaciones en la vida cotidiana y profesional de los consumidores. Sin embargo, quedan preguntas abiertas sobre si la memoria puede recuperarse con el tiempo y cuáles son los efectos a largo plazo del consumo de cannabis en el cerebro humano.