Los peligros de los microplásticos

Los microplásticos, diminutas partículas de plástico que se encuentran en todas partes, desde los alimentos hasta la ropa y el aire que respiramos, representan un creciente peligro para el medioambiente y la salud humana. Estas partículas, algunas invisibles al ojo humano, se infiltran en nuestra vida cotidiana, y su presencia en alimentos, el agua y el aire es motivo de creciente preocupación.

Los microplásticos se originan en diversas fuentes, incluyendo la descomposición de plásticos más grandes, productos de limpieza, cosméticos y la abrasión de neumáticos y asfalto. Sorprendentemente, la Organización de las Naciones Unidas estima que ocho millones de toneladas de microplásticos ingresan a los océanos cada año, lo que amenaza la vida marina y, en última instancia, la cadena alimentaria.

Además de su impacto en el medioambiente, se ha descubierto que los microplásticos también afectan la salud humana. Investigaciones de la Escuela de Medicina de la Universidad Yonsei en Seúl indican que estos microplásticos pueden estimular la liberación de disruptores endócrinos y transportar sustancias químicas tóxicas, como metales pesados y contaminantes orgánicos, que las personas absorben.

En nuestros hogares, una de las principales fuentes de microplásticos es el lavado de textiles, especialmente aquellos hechos de fibras sintéticas como el poliéster. Estas partículas se desprenden durante el lavado y contaminan los sistemas de agua. El calentamiento de alimentos en envases de plástico en el microondas también libera microplásticos y sustancias dañinas en la comida.

Para reducir la exposición a los microplásticos en nuestros hogares, se recomienda optar por materiales naturales en textiles y muebles, elegir productos de limpieza menos abrasivos y evitar calentar alimentos en envases de plástico, optando por vidrio o cerámica. Además, es aconsejable evitar sartenes antiadherentes, ya que su desgaste puede liberar microplásticos peligrosos. Se pueden elegir alternativas como sartenes de hierro, acero inoxidable, cerámica o piedra.

En cuanto a los productos de cuidado personal, se sugiere optar por cepillos de dientes con cerdas naturales, hilo dental con cera de abeja y productos para el cabello sin silicona o derivados del petróleo. Además, elegir ropa de algodón orgánico es una opción más amigable con el medio ambiente. Al tomar estas medidas, podemos contribuir a reducir la presencia de microplásticos en nuestros hogares y proteger tanto el planeta como nuestra salud.