El Salvador elimina al bitcoin como moneda oficial tras cuatro años de adopción
La Asamblea Legislativa aprobó la reforma que retira el carácter obligatorio del bitcoin y lo deja como opción voluntaria, en un contexto de negociaciones con el FMI.
El Salvador dejó de considerar al bitcoin como moneda de curso legal menos de cuatro años después de convertirse en el primer país del mundo en adoptarlo. La decisión se concretó tras la reforma a la Ley Bitcoin, aprobada por la Asamblea Legislativa el miércoles, que eliminó tres artículos y modificó seis de la legislación original de 2021.
Con este cambio, el criptoactivo ya no es moneda oficial y su uso queda limitado a transacciones entre ciudadanos y empresas privadas, bajo un esquema completamente voluntario. Antes de la reforma, la ley exigía que todos los comercios aceptaran pagos en bitcoin, salvo que carecieran de la tecnología necesaria. Ahora, la aceptación dependerá exclusivamente de cada negocio.
El proyecto de reforma fue presentado por la ministra de Turismo, Morena Valdez, a solicitud del presidente Nayib Bukele, quien hasta el momento no ha emitido comentarios sobre la medida. Su aprobación ocurre en un escenario económico desafiante para el país, marcado por negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para acceder a un préstamo de US$1.400 millones. Uno de los requisitos del FMI para concretar el acuerdo era la reducción de los riesgos asociados al bitcoin.
Polémica por la redacción de la reforma
La nueva redacción de la ley generó incertidumbre entre analistas y juristas. El artículo primero, por ejemplo, eliminó la palabra "moneda" pero mantuvo el término "de curso legal", lo que desató dudas sobre la naturaleza del bitcoin en el país.
"Desaparece el concepto de moneda", explicó la economista Julia Evelin Martínez. "El bitcoin podrá usarse si ambas partes lo acuerdan, pero ya no es obligatorio aceptarlo". En la misma línea, el economista y expresidente del Banco Central de Reserva, Carlos Acevedo, calificó la reforma como "confusa" y "oscura".
Otra modificación clave establece que ni impuestos ni deudas estatales podrán pagarse con bitcoin. "Las obligaciones monetarias del Estado, domésticas y externas, deberán ser pagadas en las monedas que fueron contraídas", indica el nuevo artículo 12.
Impacto en la economía y reacciones
La medida podría facilitar el acceso al préstamo del FMI, lo que aliviaría la situación financiera de El Salvador. Según el Banco Central de Reserva, el país registró en 2023 un déficit comercial de más de US$8.000 millones y su crecimiento económico fue el más bajo de Centroamérica por quinto año consecutivo.
Mientras Bukele y su partido, Nuevas Ideas, han guardado silencio sobre el tema, la embajadora de El Salvador en EE.UU., Milena Mayorga, aseguró que el país seguirá ampliando su reserva de bitcoin. "El Salvador sigue siendo 'Bitcoin Country'. La Asamblea tomó esta decisión por la coyuntura, pero la criptomoneda seguirá siendo parte de nuestra estrategia", declaró.
Desde su adopción en 2021, el bitcoin no tuvo el impacto esperado en la economía local. Según la revista Time, el propio Bukele admitió recientemente que "el bitcoin no ha tenido la adopción que esperábamos". A pesar de ello, el gobierno continúa apostando por el activo digital como una herramienta financiera y promocional.